jueves, 11 de noviembre de 2010

Querer es esencialmente sufrir, y como vivir es querer, toda la vida es por esencia dolor. Cuanto más elevado es el ser, más sufre... La vida del hombre no es más que una lucha por la existencia con la certidumbre de resultar vencido. La vida es una cacería incesante, donde los seres, unas veces cazadores y otras cazados, se disputan las pilfarras de una horrible presa. Es una historia natural del dolor, que se resume así: querer sin motivo, sufrir siempre, luchar de continuo, y después morir... Y así sucesivamente por los siglos, de los siglos hasta que nuestro planeta se haga trizas.

No sé qué escribir -teniendo material para-, ni qué tema tratar y en estos casos me gusta reflexionar y hacer reflexionar con las partes favoritas de esos libros que he desmenuzado -literalmente- de leerlos tantas veces.
Aquí tenéis un fragmento del ensayo de Shopenhauer Parerga y Paralipómena -bastante conocido- que recomiendo leer porque en él hay cosas bastante interesantes y, de hecho, esta parte es una de las más conocidas y una de mis favoritas.

Ahora al releer esta parte, que he apuntado en un cuadernito sacado del baúl de los recuerdos resultado de una limpieza a mi habitación en Zaragoza, simplemente he pensado que sería interesante publicarlo y con pocas palabras hacer trabajar estas cabecitas.

Disfrutad de la vida que es una sola y si os piya la lluvia de camino poneros los cascos, quitaros las zapatillas y sentid la lluvia en vuestros pies, no hay nada mejor.

pd: no hagáis eso si hace mucho viento o si sois propensos a catarros.

2 comentarios:

Fernando dijo...

Hola!
Tengo la ligera impresión de no haber escogido la entrega más feliz para dejar un comentario.

No estoy decepcionado, sin embargo, de haberlo leído, sino todo lo contrario.

Muy complacido de haber aparecido por aquí. Las presentaciones son casi innecesarias, cierto?

Saraiba dijo...

Me ha gustado volver a releer este texto, es precioso!! Gracias por compartirlo.Un besote